LA HIJA DEL AGUA

Publicado el 7 enero, 2013
Fecha y Hora: MARTES  8 – 21’30 h.  Entrada libre (hasta completar aforo).  
Lugar: Salón de actos de la E.T.S. de Ingeniería de Edificación.

MAESTROS DEL CINE CLÁSICO VI: JEAN RENOIR (1ª parte). Centro de Cultura Contemporánea Cine Club. Universidad de Granada.

Cartel de la película.

Año de estreno: 1924. Duración: 67 min. 
País: Francia. Género: Drama Romántico. Cine Mudo.

 
Título Orig.- La fille de l’eau.  Director.- Jean Renoir.  Argumento y Guión.- Pierre Lestringuez & Jean Renoir.  Fotografía.- Jean Bachelet & Alphonse Gibory (B/N).  Montaje.- Jean Renoir. Productor.- Jean Renoir.  Producción.- Films Jean Renoir.  Intérpretes.- Catherine Hessling (Virginia Rosaert), “Pierre Philippe” [Pierre Lestringuez] (Jef Rosaert), Pierre Champagne (Justin Crépoix), Madame Fockenberghe (Madame Raynal), Harold Lewingston (Georges Raynal), Georges Térof (M. Raynal), Charlotte Clasis (Madame Maubien), Pierre Renoir (el campesino).
Música de sala: L’Atalante (1934) de Jean Vigó. Banda sonora original de Maurice Jaubert.

Intertítulos originales con subtítulos en español

Proyección con acompañamiento musical compuesto e interpretado a piano por José Ignacio Hernández.


Temática: Virginia (Catherine Hessling) tiene que mantenerse a sí misma después de la muerte de su padre. Todo el dinero que le dejó su padre ha sido gastado por su tío borracho, Jef (Pierre Lestringuez, también guionista del film), para comprar más bebida. Después del fallido intento de vivir con unos bohemios, es acogida por el señor Raynal (Georges Térof) y se enamora de su hijo Georges (Harold Levingston). Yendo en una diligencia para pagar una deuda para Raynal, es robada por su tío, haciendo sospechar a Raynal que el dinero se lo ha quedado ella misma… Primera película de Renoir. (FILMAFFINITY)


Valoración:

   Raúl Morales Osorio coloca a LA HIJA DEL AGUA de Renoir a medio camino entre la herencia hollywoodiense y el cine de vanguardia europeo ya que el transfondo moral de este film  bebe de maestros como Chaplin, Griffith y Erich von Stroheim -que le sirven de inspiración en sus primeros films mudos pero, además, si analizamos las escenas de ensoñaciones de LA HIJA DEL  AGUA, observamos que formalmente se encuadra en las vanguardias europeas del momento (el impresionismo cinematográfico y el surrealismo).
   Hay una serie de elementos que hacen que LA HIJA DEL AGUA sea una película a considerar en su género como son la habilidad narrativa y el dominio del montaje de Renoir, resultado de su bagaje como espectador. Morales Osorio pone como ejemplo la secuencia de la quema del carromato por los campesinos. En concreto, la pulsión rítmica del montaje en el que se suceden los primeros planos de los personajes, combinando diferentes tamaños de encuadre, transmite al espectador una serie de emociones afines al drama narrado. Esta sucesión rápida de planos ordenados es utilizada por Renoir para expresar la locura y el temor del personaje que encarna Catherine Hessling. En dicha secuencia se advierte la influencia de Erich von Stroheim así como varias referencias concernientes a la sucesión combinativa de distintos tamaños de encuadre en el montaje que serán utilizadas posteriormente por la escuela soviética.

   De hecho, Renoir utiliza una técnica en una secuencia de LA HIJA DEL AGUA, donde combina los planos de los campesinos bebiendo en una taberna con la marcha de un grupo de gansos que sale de la misma, y esa técnica será continuada por diversos realizadores soviéticos, como es el caso de Sergei M. Eisenstein y su “montaje de atracciones”, en el que encadenando dos imágenes crea una tercera imagen en la mente del espectador.

   Asimismo, el campo en el que se adentra LA HIJA DEL AGUA, el onirismo y la ensoñación, el mundo de los sueños y la relación de los personajes con el entorno que les rodea, la búsqueda de las distintas expresiones alegóricas de la naturaleza, será tratado, una década después, por el realizador francés Jean Vigó en su film L’Atalante (1934), así como estudiado por el actor y realizador inglés Charles Laughton en su film La noche del cazador (The night of the hunter, 1955), donde también se hace patente la herencia de las imágenes filmadas por Renoir.
Vídeo de La Hija del Agua/La fille de l’eau (1924)



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