DEUDA DE HONOR (2014)

Área de Cine y Audiovisual

Presentación

Hoy Viernes, 2 de Junio de 2017, a las 21:00 horas, en Sala Máxima del Espacio V Centenario (Antigua Facultad de Medicina en Av. de Madrid), el Ciclo “Memento (II): Grandes películas olvidadas del siglo XXI (especial Neo-Western)” nos ofrece, en versión original en inglés con subtítulos en español, el western “Deuda de honor (2014)“. La entrada es libre hasta completar aforo.

El ciclo está organizado por el Área de Cine y Audiovisual (Cineclub Universitario / Aula de Cine) de La Madraza.Centro de Cultura Contemporánea de la Universidad de Granada.

Deuda de honor: Las esencias del Oeste

Tommy Lee Jones, en DEUDA DE HONOR, va a las esencias del Oeste para recordar las ilusiones, el sufrimiento y la locura que muchos dejaron en aquella tierra prometida. Y especialmente las mujeres que, aunque Tommy Lee Jones se reserve el papel de quien acaba siendo protagonista, están en el cálido corazón de este drama que brinda a Hilary Swank otro de sus escasos roles rotundos como la mujer solitaria y autónoma, de firmes convicciones, que se presta a acompañar a una residencia de acogida a tres mujeres que han enloquecido por haber perdido a sus bebés, o por haberles dado muerte voluntariamente en su desesperación.

El pendenciero George Briggs (Tommy Lee Jones) se salva de la horca a cambio de acompañar a Mary Bee Cuddy,  pero el director evita la “buddy movie” a base de contraste de personalidades y, aunque introduce buenos trazos de humor y emotividad, opta por una narración seca y mesurada, con inesperados giros de guión y unos personajes que dejan entrever la complejidad de sus vidas y sentimientos y un homenaje a los pioneros tan emotivo como irónico; y consecuente con el olvido que yace bajo el polvo de esas tierras. La economía narrativa con que afronta la muerte central del film, la planificación contenida de la tensa secuencia del hotel, la medida combinación de poética y sorna en el desenlace, acercan a Tommy Lee Jones a la precisión despojada de épica, y cargada de humanidad, de un Clint Eastwood.

Deuda de honor: La historia de un viaje

Deuda de honor es la historia de un viaje, pero el opuesto al tradicional, el que nos conduce de la frontera sin vegetación, salvaje, fría y casi surrealista, al jardín de la civilización, las normas sociales, la compasión y la exuberancia. Quizá por eso se pueda afirmar que se trata de un western que se aleja del western, tanto narrativa como iconográficamente.

Deuda de honor es un viaje del desierto al jardín, de un lugar sin ley, moral ni principios a la civilización, de la frontera a la ciudad, pero también, una visita a los márgenes del género: la mujer, la locura, el borracho. Jones termina ofreciendo un portentoso aunque en apariencia modesto estudio de personajes y tejiendo una densa y compleja red de significados bajo una historia en apariencia sencilla, basada en una novela de Glendon Swarthout.

Deuda de honor: Posición de la mujer

Deuda de honor es una de las películas más justas con la posición de la mujer en las sociedades tradicionales de los últimos años, quizá porque evita utilizar a su protagonista como un icono y prefiere entenderla a partir de sus contradicciones y su relación con esa caravana de mujeres a las que la frontera ha vuelto locas. Como ocurre con su compañero de viaje, George Briggs (Tommy Lee Jones), son personajes dignos porque el director los trata así en todo momento, respetando las peculiaridades de cada uno de ellos y comprendiendo sus defectos, algo que hace que sean aún más complejos que los más maniqueos protagonistas de Los tres entierros de Melquíades Estrada imaginados por Guillermo Arriaga.

La película resulta, al mismo tiempo, muy turbadora en la representación de la locura: Aunque los flashbacks que nos ayudan a entender de manera demasiado explicativa cómo han llegado a dicho estado las mujeres pueden ser discutibles, la manera en que se introducen los hacen pasar más por terribles sueños que interrumpen la trama que por recursos narrativos fáciles. Los comportamientos de las tres mujeres son reflejos deformados de Cuddy, que en la primera secuencia toca un piano imaginario de igual manera que otra de las mujeres acaricia un muñeco pensando que es su bebé o que se ve empujada a humillarse para mantener relaciones con hombres.

Deuda de honor: Revisión de roles

Pero si Deuda de honor resulta moderna no es únicamente por su compleja descripción de personajes ni por la manera en que trabaja con los símbolos y paisajes como eco del mundo interior de los mismos, sino también porque se deshace de forma audaz de su personaje principal a mitad de la narración para centrarse en el viaje de Briggs, un hombre en principio antitético a la rigurosa Cuddy (es un borracho vagabundo cuya única preocupación es ganar dinero) y que terminará viéndose obligado no solo a continuar la labor de su compañera, sino a convertirse en ella. Es una sugerente revisión de los roles de género: La mujer que adopta la misión que los hombres no quieren hacer fallece y obliga al hombre solitario a terminar convirtiéndose, a su vez, en Cuddy, de manera que ni uno ni otro encajan en ningún rol tradicional. El desierto y su crueldad posibilitan la aparición de un nuevo orden de las cosas. Un orden en el que aquellos perfiles que habían conformado tradicionalmente la periferia del western, sus personajes secundarios (la mujer dura e ilustrada, el borracho esperpéntico pero de buen corazón) se convierten en protagonistas ante la incomparecencia del héroe canónico.

El espejismo de la nueva dignidad

En la parte final de esta película de trama errante, Briggs volverá a la civilización, declinada tanto en forma de clasista y burocrático advenimiento del capitalismo como en forma de jardín ideal, esa casa de curación regentada por Altha Carter (Meryl Streep) que, después de tan trágico viaje, parece absolutamente irreal. La nueva dignidad obtenida por el actor secundario Briggs termina revelándose como un espejismo, de igual manera que lo eran los deseos de Cuddy de establecerse con un hombre en la frontera. Al final, los muertos se olvidan, las lápidas se hunden en el río, y aquellos que han vivido el Oeste solo tienen una opción: Volver a abrazar la locura, la vida errante y la soledad, consolarse con whisky y canciones obscenas y desaparecer en el olvido de la noche estrellada.

Ficha Técnica

  • Año.- 2014.
  • Duración.- 122 minutos.
  • País.- EE.UU.      
  • Género.- Western.
  • Título Original.- The Homesman.
  • Director.- Tommy Lee Jones.
  • Argumento.-  La novela homónima (1988) de Glendon Swarthout.
  • Guión.- Tommy Lee Jones, Kieran Fitzgerald y Wesley A. Oliver.
  • Fotografía.- Rodrigo Prieto (2.35 Panavision – DeLuxe).
  • Montaje.- Roberto Silvi.
  • Música.- Marco Beltrami.
  • Productor.- Luc Besson, Peter Brant y Brian Kennedy.
  • Producción.- Javelina Film Co. – Ithaca – EuropaCorp.
  • Intérpretes.- Tommy Lee Jones (George Briggs), Hilary Swank (Mary Bee Cuddy), Grace Gummer (Arabella Sours), Miranda Otto (Theoline Belknap), Sonja Richter (Gro Svendsen), Jo Harvey Allen (sra. Polhemus), Barry Corbin (Buster Shaver), David Dencik (Thor Svendsen), William Fichtner (Vester Belknap), John Lithgow (reverendo Alfred Dowd), Tim Blake Nelson (Freighter), James Spader (Aloysius Duffy), Meryl Streep (Altha Carter).  

   Fuente: Cuaderno del Cineclub Universitario / Aula de Cine.

 

 

Sin Respuestas a “DEUDA DE HONOR (2014)”

  1. josepa

    todo el mundo dice que es buenisisma, pero me quede sin saberlo: los primeros 15 minutos son tan malos que deje de verla: escenas aburridas, sin ningun, absolutamente ningun elemento de atraccion, ni imagen bonita, ni personaje pintoresco, ni gestos comicos, peculiares o interesantes, ni musica, ni alguna acción o suceso que capte la atencion, ni nada de nada solo un toston feo……creo que una pelicula que pretenda ser buena no puede dedicar 15 minutos de tedio sin nada que ofrecer.

    Me pueden decir que es que lo bueno viene despues, y seguro que si, pero es que eso es absurdo, una pelicula de entretenimiento debe ser eso, entretenida, y solo dura dos horas, asi que las dos horas deben ser entretenidas….y si no vean un clasico y comparen, la atencion se capta desde el inicio y se mantiene de forma continua, no te da ganas ni de parar la peli para ir al baño