RUTA DEL JADE: IMPLICACIONES GEOLÓGICAS Y ANTROPOLÓGICAS

Área de Patrimonio y Ciudad / Cátedra de Patrimonio

JADE_72-731x1024b   Hoy jueves, 9 de junio, a las 20:00 horas, en el Gabinete de Teatro de La Madraza, Antonio García Casco, catedrático de Petrología y Geoquímica de la Universidad de Granada, impartirá la conferencia “Descifrando la “ruta del jade” en Mesoamérica-Caribe: Estudio geo-arqueológico de artefactos de jade pre-Colombinos en el Caribe e implicaciones geológicas y antropológicas” organizada por la Cátedra de Patrimonio de la Universidad de Granada.

   El jade jadeítico (o jadeitita) fue usada en la producción de herramientas y otros artefactos rituales en América pre-Colombina esencialmente debido a su color verde, dureza, durabilidad y color translúcido. Se conoce su consumo en las grandes culturas de Mesoámerica como la Olmeca, Maya y Azteca. Tras la conquista de América por los europeos, las rutas comerciales a través de las cuales circulaba este material colapsaron, perdiéndose el conocimiento de este material y sus fuentes.

   Durante la primera mitad del s. XX se sospechaba que una fuente probable del jade Maya y Azteca se localizaría en el valle del Motagua, en Guatemala, lo cual fue confirmado y estudiado en detalle posteriormente. Siendo la única fuente de jade conocida hasta muy recientemente en el contexto americano, no es de extrañar que se haya propuesto un origen guatemalteco para el material de los artefactos de jade de América Central. Ello reforzaría la idea de una importante red comercial (ruta del jade) desde Méjico hasta el itsmo de Panamá, llegando incluso hasta el norte de Colombia, Venezuela y el norte de Sudamérica.

   Sin embargo, el jade arqueológico pre-colombino se conoce también desde hace tiempo en el Caribe insular. En 2006 se descubrieron dos depósitos de jadeititas en las Antillas Mayores, en el Río San Juan, Cordillera Septentrional, República Dominicana, por un grupo de geólogos de la Universidad de Bochum, Alemania, y en la Sierra del Convento, provincia de Guantánamo, Cuba, por un grupo de geólogos de las Universidades de Granada y Moa, Cuba. Estos descubrimientos son extremadamente importantes para los estudios arqueológicos y antropológicos del Caribe ya que proveen de fuentes de jade locales que pudieron utilizarse, eventualmente, en el contexto de las Antillas Mayores y, quizás, las Antillas Menores y otras islas y contextos cercanos a Sudamérica, todo lo cual hace de la ruta del jade algo más complejo que su extracción y distribución exclusivamente desde Guatemala.

JADE_72    En esta charla se revisará el origen del jade y rocas asociadas, sus características geológicas y petrológicas con énfasis en el caribeño, y la relevancia de estas rocas para los estudios arqueológicos. En concreto, se ofrecen los resultados de una investigación geo-arqueológica de artefactos de jade recolectados en un largo número de asentamientos de diferentes islas (Antillas Menores, Islas Vírgenes, Puerto Rico y República Dominicana) que datan de la Edad Cerámica (450-1500 AD), lo cual convierte este estudio en el más ambicioso de su tipo jamás llevado a cabo en la geo-arqueología del Caribe. Los resultados de este estudio (en parte inéditos) sugieren que las jadeititas dominicanas y cubanas fueron usadas solo desde el 700 AD en las Antillas Mayores (República Dominicana, Puerto Rico, Cuba y posiblemente el archipiélago de las Bahamas) en el contexto de los cacicazgos Taínos de la edad cerámica tardía que vieron la llegada de los invasores europeos a partir de 1492, y que las jadeititas guatemaltecas fueron usadas en las Antillas Menores, Islas Vírgenes y Puerto Rico desde el 450 AD (Edad Saladoide tardía). Sin embargo, las evidencias petrológicas en artefactos de éstas últimas islas también apuntan la existencia de una fuente de jade no identificada de la cual llegaron materiales desde, al menos, el 450 AD. Argumentos antropológicos y geológicos convergen en sugerir que las fuentes “perdidas” de este jade pueden encontrarse en el norte de Venezuela. Emerge por tanto un escenario antropológico general en el que las fuentes continentales de jade fueron usadas con anterioridad y solo al sur de Puerto Rico, en tanto que las fuentes locales fueron explotadas sólo más tarde, durante los movimientos de población que dieron lugar a la ocupación de las Antillas Mayores y a la cultura Taína.

   Todo esto y mucho más en la conferencia “Descifrando la “ruta del jade” en Mesoamérica-Caribe: Estudio geo-arqueológico de artefactos de jade pre-Colombinos en el Caribe e implicaciones geológicas y antropológicas”. Entrada libre hasta completar aforo.

   Fuente: Cátedra de Patrimonio de la Universidad de Granada.